Jardines verticales artificiales: La estética natural al alcance de cualquier espacio

Jardines verticales artificiales

En un mundo cada vez más urbanizado, la conexión con la naturaleza se ha vuelto un deseo compartido por muchas personas. Por eso, los jardines verticales se han convertido en una tendencia en el diseño de interiores, ofreciendo una solución eficaz para trasladar la belleza de la naturaleza a cualquier espacio, desde apartamentos hasta entornos comerciales. 

Los jardines verticales han existido de diferentes formas durante siglos. Estos elementos decorativos han sido relacionados históricamente con el lujo y con el gusto de personas pudientes. Por eso, la idea de que estos jardines verticales sean artificiales ha sido una forma de democratizar estos elementos decorativos y acercarlos a prácticamente cualquier espacio, consiguiendo una evolución significativa.  

¿Quieres saber más sobre los jardines verticales artificiales? En este artículo te contamos algunos de sus aspectos más importantes: desde los beneficios hasta sus aplicaciones. 

 

¿Qué son los jardines verticales artificiales?

Los jardines verticales artificiales, también conocidos como jardines verticales sintéticos o muros verdes artificiales, son estructuras diseñadas para imitar la apariencia y la funcionalidad de un jardín vertical natural, pero están compuestas principalmente por elementos artificiales en lugar de plantas vivas.

Estos jardines suelen incorporar plantas sintéticas, paneles verdes o réplicas de revestimientos vegetales que imitan la vegetación real de un jardín tradicional. 

 

Ventajas de estos jardines verticales

Además del indudable componente estético que aportan, son muchas las ventajas asociadas a los jardines verticales artificiales. Estos elementos son capaces de imitar la belleza de un jardín tradicional y, además, incorporar algunos beneficios que en su forma natural no proporcionan. Entre las ventajas de este tipo de decoración destacan: 

  • Sin necesidad de riego: Una de las características más relevantes de los jardines verticales artificiales es su capacidad para proyectar una estética excelente sin una sola de gota de agua. Algo que es imprescindible en los jardines naturales. 
  • Bajo mantenimiento: Relacionado también con el punto anterior, otra de las ventajas de este tipo de elementos decorativos es su mínimo mantenimiento. Además de no necesitar agua, tampoco requieren de poda, abono o control de plagas. Esto significa menos tiempo y esfuerzo dedicado. 
  • Versatilidad de diseño: Los jardines verticales artificiales pueden adaptarse a una amplia variedad de estilos y espacios. Puedes personalizar la disposición y la selección de plantas sintéticas para lograr la estética deseada. 
  • Durabilidad: Gracias a los beneficios mencionados anteriormente, otra de las ventajas de estos soportes es la alta durabilidad. Estos jardines son resistentes a las condiciones ambientales y no se marchitan ni mueren, lo que garantiza su belleza duradera. 
  • Alergias y mascotas: Dado que no liberan polen ni contienen sustancias alergénicas, los jardines verticales artificiales son ideales para tener en casa. 
  • Mejora del bienestar: La presencia de vegetación, pese a que sea artificial, recuerda la conexión de las personas con la naturaleza, lo que se ha demostrado que ayuda reducir el estrés. 
  • Económico: Otro de los puntos a favor de esta decoración es que se trata de una alternativa más económica que los jardines naturales. Esto es más evidente a medio plazo, al no requerir de un mantenimiento costoso. 

 

Aplicaciones de los jardines verticales artificiales

Uno de los aspectos más destacados de estos materiales decorativos es, sin duda, la gran versatilidad que ofrecen a la hora de ser instalados en multitud de espacios. Los jardines verticales artificiales se integran a la perfección en multitud de entornos y propósitos. Por eso, en los últimos años se han convertido en una opción muy popular en el diseño de interiores. 

¿Cuáles son los emplazamientos más habituales para este tipo de estructuras? A continuación, te lo contamos.  

  • Decoración de interiores: Desde salas de estar hasta oficinas, los jardines verticales artificiales añaden un toque de frescura y vitalidad a cualquier espacio interior, sin la preocupación de riegos o mantenimientos. 
  • Espacios comerciales: Una de las formas de mejorar la estética en negocios es incorporar estos jardines verticales. De esta forma, el espacio será más atractivo y será más factible atraer a los clientes. 
  • Decoración de eventos: Es habitual encontrarse estos componentes decorativos en bodas, fiestas y eventos especiales, gracias a la belleza que proporciona su apariencia durante la celebración de estos acontecimientos. 
  • Espacios al aire libre: Aunque hemos venido hablando de espacios interiores, también son soluciones para exteriores, sobre todo en áreas donde el riego es un desafío como terrazas o patios. 
  • Zonas de alto tráfico: En lugares donde el mantenimiento es difícil. Por ejemplo, en aeropuertos o estaciones, los jardines verticales ofrecen una solución duradera y atractiva. 

Como hemos visto, en decoración e interiorismo, estos elementos son una solución para traer la belleza de la naturaleza a cualquier espacio sin necesidad de un mantenimiento intenso. Su versatilidad lo convierten en una elección acertada en una amplia gama de aplicaciones. 

Con los jardines verticales artificiales, ¡el verde está al alcance de todos! Si estás pensando en incorporarlos en tu próximo proyecto de interiorismo, contáctanos, en Hausâl estaremos encantados de ayudarte.

 

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